Ya sabemos que internet es la fuente de búsqueda más amplia que se conoce, así como el tablón de anuncios más universal.
Por ello, si queremos saber cómo captar clientes por Internet y atraerlos hacia nuestro negocio necesitamos:
- Ofrecer una exposición adecuada y atractiva del producto.
- Ganar presencia en Internet.
- Cumplir con las expectativas del cliente.
Ofrecer una exposición adecuada y atractiva del producto
El primer pensamiento que nos aborda al emprender nuestro viaje como empresarios es cómo conseguir el interés de nuestros clientes potenciales. Para ello, necesitamos un producto que sea sugerente y potente. Aquí es donde entran en acción el mensaje y el diseño visual de aquello que queremos vender. Entendemos “producto” como término genérico, que es aplicable tanto a uno o varios productos físicos, como a cualquier tipo de servicio.
Ganar presencia en Internet para captar clientes
Para que nuestra empresa tenga visibilidad en internet necesitamos, además de un diseño web atractivo, una estructura interna que haga posible su funcionamiento y le proporcione un crecimiento ascendente en el mundo digital en cuanto a posicionamiento web. Y lo más importante, superar el algoritmo de Google. Al hablar de una buena posición en la red, nos referimos al SEO (Search Engine Optimization). El posicionamiento SEO analiza la web, además de en su esencia estética, en la parte lógica de su contenido, siguiendo, por supuesto, diversos parámetros técnicos. Su uso indebido puede penalizarnos y perjudicar la perceptibilidad de la web en cuestión. Si somos novatos en este tema, lo mejor es recurrir a profesionales, ya que el hecho de hacerlo sin conocimiento y recursos puede desfavorecer el éxito de nuestra finalidad.
Cumplir con las expectativas del cliente
Una vez que ya conocemos algunos trucos sobre cómo captar clientes por Internet y tenemos nuestra web montada y lista, debemos dedicarnos por completo a nuestros clientes: servirá de gran ayuda recordar el lema de las tres “C”:
Conseguir, Conservar y Cuidar.
Básicamente, se trata de no derribar el trabajo conseguido después de tanto esfuerzo. Si prometemos algo, lo cumplimos. Si cometemos un error, lo enmendamos. Si reincidimos en él, buscamos la raíz y lo reparamos. Al fin y al cabo, una vez que el cliente haya aceptado nuestras condiciones, lo que esperará recibir de vuelta será confianza, comodidad, seguridad y compromiso.